John Paulson es ahora famoso y además, rico. Es el inversor que más ha ganado con el desplome de la burbuja inmobiliaria al hacerse de unos 20.000 millones de dólares para su firma en tan sólo 2 años.
El punto álgido de la historia se produjo a fines de 2007, cuando muchos inversores perdían cifras imposibles de cuantificar y Paulson llegaba a ganar más de u$s10 millones al día, simplemente el doble que, por ejemplo Tiger Woods.
Su secreto fue apostar a que el mercado inmobiliario colapsaría y que las hipotecas de alto riesgo perderían gran parte de su valor. Esta visión lo llevó a formar parte del cuadro de honor de los grandes inversores, aquellos que pasaron a la historia, como hizo George Soros cuando hizo tambalear a la libra en 1992.
Paulson contó con la ayuda de su analista Paolo Pellegrini, que desarrolló una teoría que le hizo concluir que la vivienda debería bajar un 40% para volver a su media histórica.
Con su teoría catastrofista, este hombre de 52 años debía encontrar la manera de transformarla en ganancias. Primero creyó encontrar la piedra filosofal en los seguros sobre hipotecas basura que cotizaban a precios muy bajos. Entonces, decidió comprar una gran cantidad de pólizas contra deuda en mora a bajo precio, convencido de que cuando el precio de las viviendas bajase los propietarios dejarían de pagar y sus seguros pasarían a valer mucho más.
Luego de algunos meses, entre ambos decidieron buscar más formas de apostar contra las hipotecas subprime. Para ello se reunieron con banqueros de Bear Stearns, Deutsche Bank, Goldman Sachs y otras firmas para pedirles si podían crear algún tipo de instrumento contra los que pudiera apostar. Así, decidieron crear los CDO ó paquetes de hipotecas llamados obligaciones de deuda colateralizada.
Los bancos de inversión venderían las CDO a clientes, convencidos de que el valor de las hipotecas se mantendría y Paulson compraría seguros para las CDS, es decir, una apuesta a que perderían valor.
Los que invirtieron en estos productos perdieron gran parte de su dinero, pero al cerrar 2007 Paulson obtuvo una ganancia personal de casi u$s4.000 millones, la mayor obtenida en un año en la historia de los mercados financieros.
Posteriormente, Paulson trasladó su apuesta a la baja al sector (financiero), donde ganó cientos de millones de dólares, coincidiendo con el peor momento de la banca en las últimas décadas.
Entre las principales víctimas de las posiciones del gestor norteamericano se situaron entidades británicas como Royal Bank of Scotland, Lloyds o Barclays.
Este tipo de estrategias provocaron que Paulson fuera uno de los cinco gestores de hedge fund citados por el Congreso de Estados Unidos –junto con George Soros, Philip Falcone, James Simons y Kenneth Griffin– para establecer si sus inversiones eran un peligro para los mercados.
Tras ganar u$s15.000 millones apostando al derrumbe del mercado, ahora Paulson considera que este sector podría remontar vuelo en los próximos meses y es por ello que pasó de apostar contra el mercado a tratar de sacar provecho del mismo.
Es por ello que lanzó recientemente un fondo que invertirá en el sector de los inmuebles y ha incrementado sus posiciones en titulizaciones hipotecarias.
Para el nuevo emprendimiento, el Paulson Real Estate Recovery Fund, pretende captar 200 millones de dólares que dedicará a activos inmobiliarios depreciados.
Paralelamente, adquiró una participación de u$s100 millones en la consultora inmobiliaria CB Richard Ellis. Pero eso no es todo, ya que otra de sus grandes apuestas en los últimos meses está siendo el oro.
Para eso aumentó su exposición en el dorado metal en u$s4.300 millones durante el primer trimestre del año. Para ello eligió los fondos cotizados (ETF) y ciertas compañías del sector.
En tal sentido, Bloomberg afirmó que Paulson apoya al equipo directivo de la minera surafricana AngloGold Ashanti, después de convertirse en uno de los mayores accionistas de la compañía. La cotización de la onza superaba el miércoles los u$s1.150, por lo que acumulaba una ganancia del 30% en lo que va del año. Para seguir sumando.
En la próxima entrega, los consejos de John Paulson sobre las inversiones.
Hasta la próxima.-
El punto álgido de la historia se produjo a fines de 2007, cuando muchos inversores perdían cifras imposibles de cuantificar y Paulson llegaba a ganar más de u$s10 millones al día, simplemente el doble que, por ejemplo Tiger Woods.
Su secreto fue apostar a que el mercado inmobiliario colapsaría y que las hipotecas de alto riesgo perderían gran parte de su valor. Esta visión lo llevó a formar parte del cuadro de honor de los grandes inversores, aquellos que pasaron a la historia, como hizo George Soros cuando hizo tambalear a la libra en 1992.
Paulson contó con la ayuda de su analista Paolo Pellegrini, que desarrolló una teoría que le hizo concluir que la vivienda debería bajar un 40% para volver a su media histórica.
Con su teoría catastrofista, este hombre de 52 años debía encontrar la manera de transformarla en ganancias. Primero creyó encontrar la piedra filosofal en los seguros sobre hipotecas basura que cotizaban a precios muy bajos. Entonces, decidió comprar una gran cantidad de pólizas contra deuda en mora a bajo precio, convencido de que cuando el precio de las viviendas bajase los propietarios dejarían de pagar y sus seguros pasarían a valer mucho más.
Luego de algunos meses, entre ambos decidieron buscar más formas de apostar contra las hipotecas subprime. Para ello se reunieron con banqueros de Bear Stearns, Deutsche Bank, Goldman Sachs y otras firmas para pedirles si podían crear algún tipo de instrumento contra los que pudiera apostar. Así, decidieron crear los CDO ó paquetes de hipotecas llamados obligaciones de deuda colateralizada.
Los bancos de inversión venderían las CDO a clientes, convencidos de que el valor de las hipotecas se mantendría y Paulson compraría seguros para las CDS, es decir, una apuesta a que perderían valor.
Los que invirtieron en estos productos perdieron gran parte de su dinero, pero al cerrar 2007 Paulson obtuvo una ganancia personal de casi u$s4.000 millones, la mayor obtenida en un año en la historia de los mercados financieros.
Posteriormente, Paulson trasladó su apuesta a la baja al sector (financiero), donde ganó cientos de millones de dólares, coincidiendo con el peor momento de la banca en las últimas décadas.
Entre las principales víctimas de las posiciones del gestor norteamericano se situaron entidades británicas como Royal Bank of Scotland, Lloyds o Barclays.
Este tipo de estrategias provocaron que Paulson fuera uno de los cinco gestores de hedge fund citados por el Congreso de Estados Unidos –junto con George Soros, Philip Falcone, James Simons y Kenneth Griffin– para establecer si sus inversiones eran un peligro para los mercados.
Tras ganar u$s15.000 millones apostando al derrumbe del mercado, ahora Paulson considera que este sector podría remontar vuelo en los próximos meses y es por ello que pasó de apostar contra el mercado a tratar de sacar provecho del mismo.
Es por ello que lanzó recientemente un fondo que invertirá en el sector de los inmuebles y ha incrementado sus posiciones en titulizaciones hipotecarias.
Para el nuevo emprendimiento, el Paulson Real Estate Recovery Fund, pretende captar 200 millones de dólares que dedicará a activos inmobiliarios depreciados.
Paralelamente, adquiró una participación de u$s100 millones en la consultora inmobiliaria CB Richard Ellis. Pero eso no es todo, ya que otra de sus grandes apuestas en los últimos meses está siendo el oro.
Para eso aumentó su exposición en el dorado metal en u$s4.300 millones durante el primer trimestre del año. Para ello eligió los fondos cotizados (ETF) y ciertas compañías del sector.
En tal sentido, Bloomberg afirmó que Paulson apoya al equipo directivo de la minera surafricana AngloGold Ashanti, después de convertirse en uno de los mayores accionistas de la compañía. La cotización de la onza superaba el miércoles los u$s1.150, por lo que acumulaba una ganancia del 30% en lo que va del año. Para seguir sumando.
En la próxima entrega, los consejos de John Paulson sobre las inversiones.
Hasta la próxima.-
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